Entra un señor a un bar y el mozo le pregunta:
- ¿Qué quiere?
- ¡Que qué quiero!, JA! quiero una casa más grande, tener más plata, que mi mujer esté buena, ser más joven, tener auto.....
- No, hombre, ¿Que qué desea?
- ¿Qué deseo?, tener una mansión, ser millonario, tener una supermodelo como amante.
- ¡No hombre! ¿Que qué va a ser?
- ¿Que qué va a ser? Yo preferiría que sea nena pero si es nene no importa.
- ¡No loco! ¿Que qué vas a tomar?
- ¡Ah, hombre, eso se dice antes! ¿Qué hay?
- Pues nada, por aquí, siempre detrás de la barra...
-Mozo, mozo, hay un gusano en mi plato.
-No, señor, eso es su salchicha.
-Mozo, mozo, hay una cucaracha muerta en mi ensalada. Quiero que venga el encargado.
-Eso no servirá de nada, señor, el encargado también le tiene asco a las cucarachas.
-Mozo, mozo, hay una mosca en mi sopa.
-No se preocupe, señor, no beberá mucho.
-Mozo, mozo, hay una mosca muerta en mi sopa.
-Chsss...! Cállese, o todos los clientes nos la pedirán.
-Mozo, mozo, hay una mosca muerta en mi sopa.
-Si señor, la verdad es que no son buenas nadadoras.
-Mozo, mozo, hay una mosca muerta en mi sopa.
-Y que esperaba por este precio? Una viva?
-Mozo, mozo, hay una mosca nadando en mi sopa!
-Y que quiere que haga? Que llame a un salvavidas?
-Mozo, mozo, la carne sírvamela cruda.
-¿Cómo cuánto de cruda, señor?
-Que le pinches y le duela.
-Mozo, mozo, mi plato está mojado.
-No señor, no es que esté mojado, eso es la sopa.
-Mozo, mozo, pruebe esta sopa.
-Si, señor. Dónde está la cuchara?
-A-ja-ja...
-Mozo, mozo, qué es esto que hay en el menú?
-Eso es comida, señor.
-Pero que asco! Y cada cuánto limpian ustedes las cartas?
-Mozo, mozo, qué significa esta mosca en mi sopa?
-No lo se, señor, no soy parapsicólogo.
-Mozo, mozo, quisiera tomar un huevo frito grasiento y un filete de cerdo quemado, con una ensalada aguachinada.
-Lo siento, señor, aquí no servimos así.
-Cómo que no? Si comi aquí eso ayer..
-Mozo, mozo, quisiera un vaso de té.
-Yo también, pero por favor, mi vaso que esté limpio.
-Sí, señores.
Al cabo de un rato, vuelve el mozo y dice:
-Quién de ustedes me había pedido el vaso limpio?
-Mozo, mozo, se ha dado cuenta de que lleva metido el pulgar en mi sopa?
-No se preocupe, señor, no está caliente, no me quemaré.
-Mozo, mozo, tráigame un té sin leche.
-Lo siento, señor, no tenemos leche, qué le parece un té sin crema?
-Mozo, mozo, un vino!
-Blanco o tinto?
-Da igual, es para un ciego.
-mozo, hay una mosca en la sopa.
-No se preocupe. ¿Ve la araña en el pan? Pues ahora se la come.
-mozo, una tortilla.
-Francesa o Española?
-Y que más da, coño! Se cree que voy a hablar con ella?
- Mozo, mozo, en mi sopa hay un pelo!
- Bueno, señor, no creo que sea para ponerse tan mal.
- Quizá tenga razón. Entonces, deje la sopa.
- Aunque pensándolo bien, el cocinero es calvo...
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